martes, 6 de septiembre de 2011

PROYECCIÓN DE VIDA DE OSWALDO ALBERTO ANDRADE TAPIA

Infancia, Adolescencia y Juventud.

Nace el 11 de abril de 1950 a las diez de la noche, martes santo e inicio de invierno. El hospital Dr. Luis Razetti, fue el escenario de su primera presentación a este mundo. Fue bautizado en la Catedral Nuestra Señora del Pilar con el nombre de Oswaldo Alberto. Sus padres Segundo María Andrade y Aura Clemencia Tapia Odriosola tuvieron cuatro hijos tres varones y una hembra, de los que Oswaldo fue el segundo. Vivieron en la Avenida Marqués del Pumar en la casa N° 10-8, hogar donde fueron criados y educados todos sus hermanos.
Comenzó sus primeros estudios de preescolar en el año 1954; paredes desocupadas cartones, papeles sueltos y cuadernos fueron los mejores amigos de su infancia. Pero esto no fue una ventaja, cada día un llamado de atención de las maestras y muchas citaciones llegaban a su mamá para que tomara una decisión con respecto a su situación; sus compañeritos sabían de matemáticas, geografía, historia y el sabía de dibujo y color, no se interesaba en lo demás. Las épocas de vacaciones eran donde el sentía que pasaba lentamente el tiempo, pero aprovechaba dejando atrás tantos recuerdos de regaños por su maestra y se dedicaba a reunir de locha a locha para comprar en una pequeña librería de la calle Camejo una cajita de pinturas con dos o tres pinceles. Dibujaba y pintaba en secreto para no molestar a sus familiares.
Al terminar la primaria Aura Clemencia, su madre, lo envió a estudiar en el Colegio “Provincial Barinitas”, pero lo que sus padres no sabian era que entre sus cosas llevaba escondido dos libros de dibujo básico, que un amigo de familia había dejado olvidados en su casa; regresaban los problemas porque sus compañeros sabían de todas las materias, y él solo a medias; sus dibujos, hechos en secreto, llenaban su vida.
Ya en la escuela las palabras de sus profesores le impresionaban, pero de tal manera que todo lo veía como una forma de pintar y dibujar no de sumar y restar.
Entrando en adolescencia, catorce años, a duras penas cursó el primer año y regresó a casa. No podía seguir haciendo lo que no le gustaba, aparte de eso extrañaba el patio de su casa donde desde niño en las épocas de lluvia aprovechaba el barro color chocolate y todo lo que caía en sus manos para crear, quedando esto en el banco de su memoria.
Para el año 1965; Dibujaba y copiaba todo lo que le atraía y llamaba su atención. Pintaba encargos de carteleras escolares, retratos de niños y adultos, así transcurrió ese año y al siguiente ocurrió el milagro de que su hermano mayor Alcide Segundo, lo inscribiera en la Escuela de Artes Plásticas “Cristóbal Rojas”. Desde ese año conoció la escuela de artes plásticas y nunca quiso dejar de ir por ser lo único que le importaba y lo hacia feliz, era aprender dibujando y pintando. La admiración no tardo en llegar por parte de sus compañeros y esto era gracias a las enseñanzas de su maestro Rafael Maria Calvo, quien exigía dibujo preciso y exacto, proporción y valores, Andrade siempre estuvo claro que a pesar de muchas exigencias su maestro era un ejemplo a seguir, Rafael Calvo lo guió por varios años en el camino de la plástica.
Copio muchas obras de pintores famosos entre ellos Vincent Van Gogh, Chardín, Honore Daumier y otros, donde aprendía su biografía y su técnica, mediante conocimientos teóricos y prácticos.
Los años de su adolescencia los paso constantemente en sus clases de pintura, y en cuanto a lo familiar siempre estuvo bajo los cuidados de su mamá; él y sus hermanos Ivonne Rosalía, Néstor Orlando y Alcides Segundo muy unidos ayudaban en los quehaceres del hogar, así Andrade se ganaba el permiso de ir diariamente a sus clases. Su padre muy poco compartió con ellos, ya que tuvo otro matrimonio en la ciudad capital, donde les dio seis hermanos más. Pero quien siempre estuvo al tanto de toda la familia fue el padre de Aura Clemencia, es decir, el Abuelo y maestro José Antonio Carrero, creador del Himno de Seuquen- Trujillo.

Todo esto hasta enero del año1969, donde se va por un tiempo a San Cristóbal estado Táchira, Viviendo en la parte alta de la ciudad en el barrio “Libertador”; con suerte consiguió un excelente amigo llamado Melitón Rodríguez “El mocho”, que a pesar de haber nacido sin brazos fue su mejor compañero y juntos aprendieron mucho de la pintura, Melitòn pertenece a la Asociación mundial de Pintores de boca y pie. Otros compañeros los acompañaban a pintar muchos paisajes del estado, obras que quizás todavía permanezcan en casas de algunas familias tachirenses y colombianas.
Estando en Táchira decide estudiar bachillerato en el Colegio “San Cristóbal”, graduándose para el año 1972 con buenas calificaciones y buen promedio 17.5 en cuarto y quinto año, lo que le permitió entrar a estudiar Medicina Veterinaria en la Universidad Central de Venezuela, núcleo Maracay. No continúa la carrera por causas ajenas. Regresa a Barinas en 1975 y sigue pintando.

Década de los Setenta

 Regresando a Barinas en 1975, ingresa a la Universidad Nacional Experimental de los Llanos Occidentales “Ezequiel Zamora” en el año 1976 a la carrera de Sociología del Desarrollo. Muy poco se entusiasmo por esos estudios, el eclecticismo se hacía una constante en su vida. Sin embargo sucedió algo importante para todos y para la Universidad. Con un grupo de amigos estudiantes de Sociología.  entre ellos José Coa, que cursaba el cuarto semestre, Pedro Paredes, José  Duin de Cubiro estado Lara, hablan con el Rector Dr. Felipe Gómez Álvarez y le proponen la creación de los talleres libres de Artes Plásticas lo cual recibió con agrado, aceptando la propuesta y así mismo los encomendó para elegir a el maestro que les daría las clases, es así como escogen y llega a la universidad Rafael Avendaño Dávila, siendo alumno del maestro Rafael Calvo, pero que tuvo la oportunidad de cursar estudios en Florencia- Italia.
En ese mismo tiempo Rafael confiando el los trabajos de Andrade lo invita a participar en una exposición denominada “12 pintores barineses” en los salones del casino militar. Fueron tiempos muy fructíferos en su carrera, se abrieron muchas puertas, pero también se cerraron otras. 
En el año 1977 represento a Barinas en la exposición del Rotari Club de Valencia estado Carabobo por invitación de su amigo Pedro Antonio Gómez (PEDAGÖN) Excelente Artista falconiano residenciado en Valencia desde niño.

En 1978 no vuelve a los talleres de la universidad, se retira y se casa con Carmen Beatriz Serrano Díaz. Dedicándose  a trabajar como representante de una compañía norteamericana en la venta de productos de mantenimiento industrial, ganando mucho dinero, que a la vez para el mismo era sorprendente.
Un día caminando por las calles del casco de la ciudad se consiguió a su amigo Rafael Avendaño, que en ese momento era Director de la Escuela de Artes Plásticas “Cristóbal Rojas”, entre conversaciones y muchos cuentos le pide que vuelva a la escuela pero esta vez como maestro, Andrade con tantas ocupaciones que tenia lo piensa, pero por ser lo que siempre le había gustado, acepta; Comenzando su trabajo en Septiembre del año 1979, Recibiendo una credencial de manos de quien era Director de Educación el Profesor Hugo de los Reyes Chávez. Olvidando aquella compañía de mantenimiento industrial, fue capaz de rechazarla  por el placer sublime de volver al Arte, ahora como maestro de la pintura.
Ya casado y con vísperas de su primer hijo, abandona la casa de su madre, lugar donde vivía, mudándose a una casita construida  totalmente de zinc, situada en el barrio La Esperanza, recién fundado.
Nuevos tiempos llegaron para Andrade; vivir en una casa que de noche hacia un intenso frío y de día mucho calor, pasar hambre, con trabajo pero no le alcanzaba para cubrir el pago de un carro, que se le llevaba todo el sueldo, gastos de alimentos, medicina y otras cosas más; a pesar de todo siempre se sintió que era un hombre feliz. Convencido de que vendrían cosas mejores en su vida.

Década de los Ochenta


Nace en 1980 su hija mayor, colocándole el nombre de Beatriz Gabriela Andrade Serrano; las necesidades aumentaron. Para 1981, Rafael renunció a la Dirección de la escuela y le propuso a Andrade que ocupara su cargo, siendo entonces nombrado como el nuevo director para esa época; estaba mejorando todo, la estabilidad económica era más favorable. Deciden mudarse al municipio Barinitas; todo iba en buena marcha.
Al pasar el tiempo ya su familia estaba creciendo, aunque por motivos desconocidos se le muere un hijo varón, pero luego Dios los premia con dos hembras más, cada una con pocos años de diferencia, una llamada Liset Carolina y  Gioconda Elizabet.        
Su labor como director no le permitía pasar mucho tiempo con su familia, pero eso nunca fue obstáculo para ser un buen padre.
En la Dirección conjuntamente con los profesores se encargaban de elaborar los  programas de estudio de Artes Plásticas de la escuela,  Se publicó y difundió por radio y prensa el trabajo que ellos  desarrollaban. Eso les trajo, como consecuencia feliz, el registro de numerosa matricula en la escuela. Los profesores Atala Maninat León, Rafael Vegas, Henry Alizo, Ivo Sánchez, Rosario de Mendoza, Nahír Peñaranda y Andrade se encargaban de las diferentes cátedras.
Esos dos años de trabajo productivo y laborioso se acabaron en un abrir y cerrar de ojos. Marzo del año 1984 un nuevo Gobierno recibía el poder del Estado y, por tal motivo, fue despedido sin tan siquiera reubicarlo a su cargo anterior como Maestro de dibujo y pintura a servicio de la Escuela de Artes Plásticas “Cristóbal Rojas”. Nuevamente las cosas se estaban complicando en la vida de Andrade.

Por ser padre de familia, necesitaba conseguir la manera de cómo alimentar a sus hijos y a su esposa, siendo botado de la escuela, buscó trabajo y lo que logró conseguir fue como cobrador de vehículos para la firma “Saldivia Motors”, manteniéndose por cinco años allí; renuncia al tiempo, porque el dueño rebajó los sueldos arbitrariamente, volviendo los tiempos de estrechez económica. La necesitad hizo que cambiara cuadros por comida, y a veces ni siquiera le pagaban el valor que tenían sino que le ofrecían miserias; trabajos de esa época adornan las paredes de familias italianas en Europa y de Canadá en América.
Acercándose el año escolar 1989, logra trabajar para la Unidad Educativa “Roberto Moreno Briceño” como maestro de aula del sexto grado. Volviendo la estabilidad económica a su familia. 

Década de los Noventa


Trabajando como maestro de sexto grado, aprovechaba para enseñarles a sus alumnos algunas técnicas de dibujo y pintura. En  1991 junto con su gran amigo el maestro Víctor “Coco” Valero fundan el Festival Infantil “trompo de Colores” una fundación musical que hizo crecer la matricula escolar. A pesar de tener un trabajo, se vio en la necesidad de seguir pintando a diario, con desespero,  pero con muchas esperanzas en el futuro; venia en camino su cuarto hijo, y los gastos en su hogar seguían siendo mayores cada vez.
Dedicando tiempo a la pintura, Ganó a finales del año 1991 el primer premio de pintura regional; logrando por intermedio de la Asociación Venezolana de Artistas Plásticos del estado Barinas (AVAP), su incorporación a la Escuela de Artes Plásticas. Ese año realizó estudios de nivelación profesional en el Instituto” Federico Brandt” en la ciudad de Caracas. En esos tiempos asistió a muchos talleres de formación entre ellos un seminario de gerencia de las organizaciones culturales dictado por el doctor Nelson Morales del CONAC, Taller para la Formación de multiplicadores en el área de Escultura impartido por el profesor Bruno García del CONAC; la formación académica, dedicación al arte y perseverancia fueron las herramientas para enfrentar  tantas situaciones que la vida le coloco a Andrade.
Se incorpora en 1996 de lleno a la AVAP. Asociación Venezolana de Artistas Plásticos del estado Barinas, Las exposiciones fueron numerosas y realizadas en diferentes espacios de la ciudad. Los tiempos se volvían favorables nuevamente. Muchas exposiciones, talleres e incontable dedicación a la escuela lo hicieron merecedor de muchos reconocimientos. La década de los noventa fue muy productiva artísticamente, muchos Botones al Mérito, Reconocimientos, Placas adornaron la vida de Andrade.
Ocaso del año 1999, la AVAP convocó a elecciones, y el Profesor Antonio Boza Terán fue elegido Presidente, quedando Andrade en la Vicepresidencia. Al  poco tiempo, específicamente a inicios del año 2000 el profesor Boza le entregó la Presidencia por no poder atenderla a plenitud.
Pasando el tiempo todo parecía estar mejorando en la vida del maestro.

Década del Siglo XX hasta la Actualidad

Llevando la dirección de la AVAP en el estado Barinas, ya Andrade tenia una vida más estable, ya no pintaba con desespero, sino con esmero y voluntad; se sentía tranquilo porqué ya su trabajo y su familia estaban tomando nuevamente un buen cause;  hasta el año 2001, donde sufre el rompimiento de su matrimonio, llenándose de dolor y frustraciones personales; se divorcio y continuó su vida solo.

Andrade, sin dejarse influir por la decepción sufrida de su divorcio, continua trabajando, adquiriendo en el mismo año 2000 por La Alcaldía del Municipio la Condecoración Ciudad de Barinas, en su Primera Clase por su trayectoria artística al servicio de la Cultura del estado. Comenzaba a recoger el fruto de su dedicación al Arte, ya no como algo personal sino de servicio al colectivo. La Sala de Exposiciones ubicada frente al Palacio de Gobierno, se vestía de gala permanentemente, sus obras estaban expuestas junto con las de sus compañeros, en su mayoría barineses.

En el año 2001 una de sus obras fue seleccionada para representar a Barinas en el primer Encuentro de Artes Plásticas Latinoamericanas esa exposición se presentó en el circulo de la Fuerza Armada con la asistencia de todos los Artistas representantes de Latinoamérica, desde México hasta Argentina incluyendo las Islas Caribeñas , del 7 al 27 de julio del 2001.
Para el año 2002 específicamente en mayo, Forma parte de la Sub-Comisión Permanente de Cultura del Consejo Legislativo Regional, para la reforma a  la Ley de Cultura del estado Barinas en algunos de sus articulados.
Las propuestas empezaron a aparecer, inmediatamente Barinas recibe la invitación para un congreso a realizarse en la isla de Margarita. El proyecto por Barinas no fue aceptado, el título del proyecto era “Protección Social y Difusión Del Artista Plástico Barinés”. “Muy ambicioso altruista y lleno de humanidad” como lo interpretó la representante del CONAC, pero “no hay presupuesto para este tipo de proyecto” dijo amable y con sinceridad. Los participantes consideraron razonable la respuesta,  porque el Gobierno en ese tiempo no había previsto abordar esa problemática de los Artistas en las diferentes áreas.
Esa noche en Margarita propusieron una sola Directiva para la Asociación a nivel nacional. Renunció en pleno la directiva de Caracas, realizando inmediatamente elecciones abiertas. Barinas,  ganó la responsabilidad de la Secretaría de Relaciones Nacionales e Internacionales a cargo del maestro Oswaldo Andrade.  Gran responsabilidad que tomaba el maestro; se formaron muchas propuestas de proyectos, pero que al final se vieron burlados ya que nunca fueron llamados por la AVAP central para registrar el acta constitutiva. 
Redactando un nuevo Proyecto solo para exhibir la obra de los artistas. La Asociación tenía varios años sin registrar sus actas constitutivas por no tener recursos como hacerlo. Se adecuó posteriormente y  le presentaron un nuevo proyecto  al que para ese entonces era Viceministro de cultura el Arquitecto Francisco Sexto Novas, girando instrucciones al CONAC para que los incluyeran en el nuevo presupuesto.
Empezaban a enderezarse las cosas, desde los sentimientos de Andrade hasta su trabajo. En el año 2003, se casa nuevamente, esta vez con Elsa Molina. Teniendo en el año 2006 el primer hijo de ese matrimonio, un varón llamado Oswaldo Alfonso. Seguidamente en el 2008 Elsa, su esposa da a luz su segundo hijo, llamado Miguel Alberto. 
En la AVAP recibieron recursos del CONAC en dos oportunidades luego del Instituto Autónomo de Cultura del Estado Barinas y del IAIME. El último recurso lo utilizaron en el homenaje al Maestro Rafael Avendaño con una Exposición Certamen donde fueron galardonados en metálico los tres primeros trabajos. Entregándole  una placa de reconocimiento al Maestro y certificados de participación al resto; la realización de ese homenaje le trajo una serie de inconvenientes porque algunos compañeros reclamaron de forma injustificada un dinero que la directiva utilizo para llevar a cabo la actividad y premios a otorgar.  
Complementando sus responsabilidades de la Asociación siguió su trabajo personal plástico y a finales del año 2005 fue seleccionada una de sus obras para ser exhibida en el Museo de Arte Contemporáneo de Caracas junto con las obras de otros colegas de las demás modalidades. Dos años después fue seleccionada, nuevamente, su obra la cual estuvo expuesta en la Galería de arte Nacional (GAN).
Desde el año 2005 pertenece, por la asociación civil, al Gabinete ejecutivo Cultural del Instituto Autónomo de Cultura del Estado Barinas (IACEB).
Andrade para el año 2008 renuncia a la Presidencia de la Asociación Venezolana de Artistas Plásticos (AVAP) para dedicarme  a su trabajo creador. La AVAP fue una verdadera escuela de formación humana y teórica en su vida.
Su formación académica siguió, y su creación artística ya era reconocida a nivel nacional.  La década del siglo XX le dio una buena cosecha a Andrade, sus cuadros marcaron parte de la cultura del estado. Y seguidamente tomaron valor sentimental por haber caracterizado una nueva y feliz fase de su vida.

Su amor por las artes lo ha llevado a seguir ayudando y creando, es por eso que retomó sus estudios teóricos inscribiéndose en la carrera de artes Plásticas convenio UNEARTE- MISIÒN SUCRE junto con su hijo Oswaldo. Realizó el Diplomado en Gestión cultural, Facilitado por la UNELLEZ- Barinas convenio con la Universidad de México.  
En cuanto al presente y futuro, sigue participando; tiene un espacio Cultural en la Comunidad, donde vive, para colocar en práctica un proyecto de Escuela Comunitaria Revolucionaria con un nuevo pensamiento conceptual plástico. “ACAPIVE” son las siglas que la identifican que significa Asociación Civil de Artistas Plásticos Independientes de Venezuela. Capitulo Barinas.
Aún pertenece a la Escuela de Artes plásticas del estado Barinas, prejubilado y luchando. En su pequeño taller va elaborando las obras: Dibujos, tintas chinas, oleos, acrílicos y sobre todo su obra de corte matèrico con mucha carga de materiales sólidos sobre el soporte. Evolucionó plásticamente de lo  clásico hasta el informalismo abstracto, sin poder divorciarse de la figura humana como centro de sus trabajos.
Con 61 años de edad su espíritu se mantiene vivo y con muchas ganas de seguir creando, apoyando a los y las estudiantes, sirviéndonos de ejemplo para perseverar en nuestras metas; Andrade transmite una energía que cambia cualquier desánimo (por ser una experiencia vivida).